El maestro Adalberto Álvarez cuenta la historia de esta canción a las puertas del aniversario 30 de su creación.

Una historia personal que le dio la vuelta al mundo: “Y qué tú quieres que te den”
En el año 2021 se conmemorarán las tres décadas de uno de los temas emblemáticos de Adalberto Álvarez y su Son, “Y qué tú quieres que te den”. A propósito de este suceso, el reconocido músico cubano cuenta la historia de la canción, una de las más famosas de su amplio repertorio.
“En 1991 me hice sacerdote Ifá, durante la semana de estudio en mi cuarto tenía un piano y en mis ratos libres me ponía a tocar. Miraba lo que pasaba a mí alrededor en esos días, la cantidad de gente que venía a la casa, y traté un poco de contar la experiencia que estaba viviendo a través de una canción.
“Yo recuerdo que lo primero que hice fue la parte en que yo rapeo un poco. Primero pensé: cómo cuento esto. Y un poco lo que estaba viviendo era eso: “la casa está repleta y ya no caben más y todos se preguntan qué dirá Elegguá”. Todo ello que es parte de la ceremonia, cuando se le preguntan las cosas a los santos, etcétera. En esos días vi personas que decían que no creían en nada y estuvieron ahí, y más adelante supe de experiencias que esas mismas personas querían consultarse a deshoras.
“Al mismo tiempo de hacer la historia me dije: voy a contar algo que tenga un valor, y es así como empiezo a hablar un poco de ese sincretismo de los santos católicos con los santos yorubas, por eso se habla, por ejemplo, de “Obbatalá, Las Mercedes, Ochún es La Caridad”, etc.
“Grabamos una primera versión de este tema en 1993, era corta y la cantó Jorge Luis Rojas, Rojitas. Luego mi mamá, Rosa Zayas, me preguntó por qué no la hacíamos más larga, incluyendo otros santos que la gente quería ver reflejados, y entonces incluimos las diferentes deidades, los orishas. Le cantamos a cada uno de ellos y el tema se fue alargando, pero la reacción del público fue muy buena. En la medida que le cantábamos a esos santos que tenían hijos entre las audiencias, pues el público se sentía identificado.
“Las versiones en vivo duraban mucho y mi mamá me decía que la grabara. Yo le decía que no era posible que una emisora de radio pusiera una canción de 11 ó 12 minutos, sin embargo, ella me insistió: «grábala, que te vas a acordar de mí y verás el éxito que va a tener eso». A partir de esto y de ver lo que sucedía en los bailables, la grabamos así, en versión larga, la hicimos con Joaquín Moré y Michel González. Esa versión tuvo un éxito tremendo.
“Es una canción obligada en el repertorio nuestro, tenemos que tocarla siempre y a eso se le suma que, a pesar del paso de los años, tiene una vigencia increíble. Yo creo que ahí también los orishas pusieron su granito y, además, la visión de mi querida madre que fue la que me dio la idea. Todos los días del mundo me acuerdo de ella”.
A pocos meses de celebrar los 30 años de haber concebido el tema, el público cubano y de todas partes del mundo siguen tarareando cada uno de los versos de “Y qué tú quieres que te den”. A partir la representación fiel que realiza de esta vertiente criollísima de la cultura cubana, esta obra, sin lugar a dudas, forma parte del cancionero cubano de todos los tiempos.